(transcripcion Documental)
Instrucciones que se dieron a los Representantes del Pueblo Oriental, para el desempeño de su encargo en la Asamblea Constituyente fixada en la Ciudad de Bs. As.
Primeramente pedirá la declaración de la independencia absoluta de estas Colonias, que ellas están absueltas de toda obligación de fidelidad a la Corona de España, y familia de los Borbones, y que toda conexión política entre ellas y el Estado de la España es, y debe ser totalmente disuelta.
[discurso pronunciado por Julio Cantero en el acto conmemorativo de los 408 años de la fundacion de la reduccion que diera origen a Posadas]
Donde hoy se encuentra la ciudad de Posadas hace cuatro siglos se asentaban las aldeas de TERAPUA, AÑAPECE Y ÑAMANDÚ, tres mburubichas guaraníes que vivian aquí con sus extensas familias. Un día de 1614 vieron llegar a fuerza de remos a Roque González de Santa cruz, un religioso criollo que, para su sorpresa hablaba perfecto guaraní, le increparon, le cuestionaron ¿cómo se atrevía a venir adonde nunca antes había puesto pie español alguno? Le intimaron a que volviera por donde había venido, pero él les dijo que no venía a eso, sino “a mostrarles el camino al cielo”. Al poco tiempo Roque tenía una choza entre ellos junto a la laguna y les propuso levantar aquí una cruz y ellos con todo y ser infieles lo ayudaron. Partió entonces Roque a pedir autorización al Gobernador del Río de la plata para fundar aquí una reducción, pocos meses después regresó munido de una licencia que autorizaba la creación del poblado en este sitio. Aquel es el primer y único instrumento legal, oficial, emitido por una autoridad civil, que en nombre del rey ordena la FUNDACIÓN de un poblado en este territorio, lo que se realizó el 25 de marzo de 1615.
Sesquicentenario de la instalacion del primero organo de gobierno local en el marco de la soberanía nacional interrumpida
El 18 de Octuble de 2022 celebramos el 150 aniversario o sesquicentenario de la instalación del primer concejo municipal de nuestra ciudad, hecho que efectivamente sucedió un 18 de octubre de 1872 y representa el primer órgano de gobierno local erigido en territorio Posadeño, esto sin embargo no representa la Fundación de la Ciudad, ni del poblado ni el primer asentamiento sino la elección de autoridades que desde entonces por distintos procesos político se irán sustituyendo hasta nuestros días en el marco de instituciones de gobierno que fueron cambiando, modernizándose, complejizándose como la sociedad misma pero siempre en el ininterrumpido devenir de la soberanía nacional.
Por supuesto que la fundación del pueblo se remonta a siglos antes y su poblamiento es hasta hoy indeterminado y se pierde en la memoria de la pre historia misionera, se sabe solo que en el primer contacto con la cultura occidental cristiana los habitantes de este suelo que hoy se denomina (acertadamente o no) Posadas, fueron las tribus de los "mburuvishas" Terapúa Añapese y Ñamandu, fueron ellos quienes vieron llegar a Roque Gonzáles en el remoto 1614 y luego junto a Miguel Davila, su pequeño acompañante, en 1615 munido de una ordenanza y autorización del Gobernador del Río de la Plate que lo autorizaba a la creación de pueblos sobre el Paraná "en especial en el Itapúa" (que era un sitio no un cacique como a veces suele leerse).
El 6 de noviembre de 1977, una comitiva policial detuvo al changarín brasileño Manuel Dorneles, de 40 años, en el paraje Pindayty, de Aristóbulo del Valle. Lo acusaban de un abuso sexual que nunca pudo investigarse. Luego fue trasladado a la comisaría de 25 de Mayo, donde recibió terribles torturas que le ocasionaron la muerte. La única enfermera del pueblo, alcanzó a escuchar lo ocurrido y se atrevió a organizar a varios vecinos para realizar la denuncia judicial. El fiscal Roque Schwemberg, del juzgado de Oberá, investigó el caso y el entonces juez Ricardo Biazzi, dictó la prisión preventiva y terminó condenando a seis policías y un médico forense, quienes pasaron varios años presos en la colonia penal de Oberá.
Fue aquella, la primera vez en la República Argentina se condenaba a miembros de las fuerzas de seguridad por delitos enmarcados en lo que hoy se conocer como violencia institucional.
Al 45 años de este episodio olvidado, se publicará “El caso Dorneles”, un libro del periodista y escritor misionero Sergio Alvez, quien se abocó durante tres años al rescate y la investigación del caso, con el objetivo de poder narrar “la historia y el contexto de la primera condena judicial por violencia institucional en la República Argentina, una problemática compleja y plenamente vigente en democracia”, según señaló el autor.

A pesar de lo instaurado acerca del lugar donde Artigas cruzó el río Paraná sin saber que se dirigía a un forzado exilio de por vida. Debemos recordar que tambien existen autores que atribuyen a Itapúa, hoy Posadas, el ser el sitio por donde Artigas pasó al Paraguay.
Rengger en 1828 afirma que Artigas se presento en "en la ribera izquierda del Paraná, frente a la misión de Itapúa" donde pidio pasar, Martín de Moussy a mediados del S XIXdice que "se había presentado en Itapúa para cruzar" y Gregorio Funes tambien que "se presentó en frente de Itapuá" mas adelante los analizaremos brevemente.
No es nuestra intención polemizar en este punto, pero no puede menos que llamar nuestra atención, aunque más no sea para percibir el grado de preponderancia que aún tenía el paso de Itapúa, que suponiendo no sea el lugar por donde Artigas pasó al Paraguay, aun así, hizo a estos autores verse arrastrados en la inercia de atribuirle a este el ser la zona del tránsito de Artigas hacia las tierras paraguayas y no a otro sitio como se sostiene. No es nuestro objetivo preguntamos aquí, si debe investigarse aún o pueden ser descartados como erróneos estos testimonios que atribuyen al territorio de lo que hoy es Posadas, y en aquel entonces era el “paso de Itapúa”, como el último suelo argentino que pisará Artigas previo a su exilio en Paraguay, pero los mencionamos pues su reiteración es mínimamente una situación que obliga a mantener con un grado de incertidumbre los supuestos hoy tan vigentes que, reiteramos, aquí no abordamos ni indagamos con criterio de rigurosa investigacion, solo nos llama la atencion que estos testimonios van a contrapelo del saber historico mas expandido y poco citados en estudios sobre el Artiguismo.
En todo caso la sola existencia en reiteradas ocasiones de esta afirmación denota una acentuada tendencia a atribuirle este tipo de hechos relevantes como de muy probable realización en este sitio y no en otro, una tendencia a adjudicar a Itapúa un carácter relevante como coyuntura de caminos, con tránsito frecuente o el ser un paso tradicional, institucionalizado, el lógico circuito, canal por donde siempre se encausan este tipo de hechos históricos en nuestra región. Esto es una constante inclinación interpretativa en los autores que como veremos en estos casos y más adelante siempre terminan concluyendo en Itapúa como el lugar por el que transitan ellos mismos o quienes son el objeto de su estudio.
A lo largo de nuestra historia como provincia pequeña periférica y, hay que decirlo, pobre, las distintas gestiones nacionales han soslayado las necesidades de nuestro territorio en mayor o menor medida; así no pocas veces estas necesidades verdaderamente básicas como las escuelas, el agua potable, la energía eléctrica, se realizan a partir de gestiones de los individuos que toman como compromiso personal resolver estas acuciantes situaciones de falencias, un grupo que se destaca en este tipo de actuar comprometido con la comunidad son los docentes; maestros, maestras, profesores en general que estando en contacto con jóvenes de distintos estratos sociales de la ciudad perciben desde primera fila la insatisfacción o frustración de estos futuros adultos, ciudadanos de un territorio que no tiene un futuro promisorio que ofrecerles, y se proponen a cambiar esta situación así como han cambiado a estos jóvenes por medio de la educación.
Un 16 de diciembre de 1811 se dio a conocer el censo que solicitó José Artigas en el marco del éxodo del pueblo oriental, hoy se cumple 210 años de ese documento. No quería dejar de pasar la oportunidad de esta fecha, (no como efeméride) como un disparador para quien quiera conocer o estudiar los acontecimientos que son parte de nuestra historia regional durante el siglo XIX.
Entre las tensiones por el éxodo del pueblo oriental.
1811 es un año convulsionado para el Litoral y el Rio de la Plata. Se suma la Banda Oriental al proceso revolucionario iniciado y liderado por Buenos Aires en 1810, sin embargo ante los intentos de ocupar la ciudad de Montevideo fracasan, ésta se mantiene firme junto a los “realistas”.
En este marco se producen varios hechos que serán muy importantes para entender la dinámica de los siguientes años. El virrey Francisco Xavier Elío entabla negociaciones con los portugueses, es decir los lusitanos avanzan, mientras, firma un armisticio con Buenos Aires, en el medio la campaña de la Banda Oriental queda expuesta a esta situación. Artigas se encuentra ante uno de los acontecimientos más importante de la época, el llamado éxodo del pueblo oriental (también conocido como “La Redora”).
Al pasar por la residencia de los Palacios, la la vendedora de verduras oculta sin que nadie vea una tacuarita entre el hueco de unos árboles. Dentro del pequeño tubo de cáñamo hay enrollados retazos de papel cuidadosamente escondidos. Son las esquelas de amor que Horacio Quiroga le dedica a la bonita Ana María, de quien estaba perdidamente enamorado. El cuentista uruguayo se las ingeniaba para entregárselas a la verdulera con las convenidas instrucciones de lo que debía hacer. Pero la nota romántica no llegó a manos de Ipe, como le decían a la menor de la familia, ya que fue incautada por su hermano Jesús, administrador del importante establecimiento yerbatero La María Antonia.
En La María Antonia se producía yerba mate por medio del cultivo. Sus verdaderos dueños eran los venezolanos Herrera Vegas, radicados en Buenos Aires desde 1871. El patriarca de la familia casó a sus hijos con las niñas Pereyra Iraola, reconocidos terratenientes y hacendados porteños. Los dos apellidos formaron un poderoso clan económico con sólidos negocios repartidos por todo el país. Se dedicaban a la ganadería, a la agricultura; poseían tambos, curtiembres, caballerizas y viñedos. También incursionaron en la explotación minera y la refinería. En el Alto Paraná fundaron una empresa llamada Propiedad Tierras y Maderas del Iguazú, que contaba con 90.000 hectáreas de explotación de selva.